M. Basilea Schlink – Autora y Fundadora 
La Hermandad Evangélica de María fue fundada por la Madre Basilea Schlink y la Madre Martyria Madauss en Alemania en 1947; surgió de un avivamiento espiritual en un grupo de jóvenes, después de la Segunda Guerra Mundial. Hoy es una comunidad interdenominacional con filiales en distintos países.
La “pequeña Tierra de Canaán” es el nombre del terreno y hogar de la hermandad en Alemania porque Dios lo prometió en medio de circunstancias humanamente imposibles. Necesitábamos aprender de Israel a confiar en la validez de las promesas de nuestro Padre Celestial.
Los fundamentos son los siguientes:
* Arrepentimiento
* Amor por Jesús
* Reconciliación
* Vivir por la fe
* Evangelización
(ver algunos textos sobre estos temas en “Biblioteca”)
El amor por Jesús está en el centro de todo ministerio de la Hermandad. Y este amor, nacido de la experiencia de su perdón, constantemente encuentra nuevas maneras de compartir el mensaje de su amor salvador con otras personas.
Madre Basilea, una autora cristiana, reconocida a nivel internacional, escribió más de 100 títulos. Su mensaje incluye un llamado incondicional al arrepentimiento y una proclamación gozosa del reino de los cielos. Su amor por Jesús ha bendecido a incontables vidas. Ella escribe desde la profundidad de su experiencia, cada vez conduciendo al lector a Jesucristo mismo. También se le ha llamado una voz profética para nuestra generación, porque ha discernido tan claramente los tiempos actuales.
Sus libros, folletos y programas están disponibles en más de 60 lenguas. (Ver Catálogo)
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Esperanza en un mundo sin esperanza
Cuando el futuro de una nación está en juego, cuando la política, la economía y la ética fracasan, son los intercesores los que pueden marcar la diferencia. Ellos tienen la clave para la recuperación, porque se enfocan en Dios, de quien sólo vienen la bendición y la salvación.
Estos textos, canciones y oraciones, extraídos de una selección de los escritos de M. Basilea, nacieron de situaciones de la vida real: terrorismo, engaño, malestar político, normas morales caducas, desastres naturales, ataques espirituales…. Han sido probados y comprobados, y han tenido resultados de gran alcance.
Todos los que conocen y aman al Señor –no sólo una élite especial– pueden ser un intercesor eficaz. Aquí se nos dice cómo.
HERMANDAD EVANGÉLICA DE MARIA -